“La simplicidad es la máxima sofisticación” – Leonardo Da Vinci
Recibí una reflexión muy profunda de un amigo. Eran sólo 3 párrafos: el primero, no lo entendí; el segundo, tuve que leerlo varias veces y, el tercero, afortunadamente era más simple y cercano a mí.
Estaba escrito en español, conocía todas las palabras, no obstante, no lograba entender el significado de todas esas palabras juntas. Mi respuesta fue reconocer mi incapacidad y recordarle las frases de Da Vinci, invitándolo a traducir su reflexión a un lenguaje más simple.
Muchas veces veo la costumbre de describir ideas, proyectos, procesos, tecnologías o cualquier cosa, en forma tal que sólo es comprensible por el autor. Aquí es donde me gusta recordar al emisor de que él es el único responsable de que el receptor comprenda el mensaje y el mejor mecanismo consiste en abusar de la simpleza.
Nadie se queja de un lenguaje simple cuando se escuchan ideas interesantes
Cuando algunas personas me dicen “es que es técnico y todos los oyentes son técnicos”, yo les pregunto si han recibido o realizado una queja por utilizar un lenguaje simple cuando las ideas son realmente interesantes. La respuesta es “nunca”.
¡Escribir es lenguaje técnico y sofisticado es muy fácil! Lo difícil es traducirlo a algo simple: si tenemos una buena idea, asegurémonos de que se entienda y abusemos de la simpleza en su explicación.
Espero que nuestros consejos te sean de utilidad. Si te interesa conocer más de este tema, pregúntanos en contacto@andreadelacalle.cl.